El balance general es un estado financiero que evidencia la situación económica y financiera de una empresa en un momento determinado, siendo considerado el estado financiero más importante para poder evaluar el panorama de la compañía.
Éste se estructura a través de los tres conceptos patrimoniales, extendiéndose cada uno de ellos en grupos de cuentas:
- Activo: agrupa todas aquellas cuentas que reflejan los valores disponibles por parte de la entidad.
- Pasivo: agrupa todas las obligaciones y contingencias.
- Patrimonio neto: se calcula como el activo menos el pasivo
A lo que respecta a su elaboración, el balance general debe realizarse una vez al año, justo al finalizar el ejercicio contable (balance final), y del mismo modo igualmente se acostumbran a realizar al inicio del ejercicio (balance de apertura), así como balances con periodicidad mensual, trimestral o semestral (balances parciales).