A continuación se ofrece una breve y sencilla explicación de las diferencias entre el Activo y el Pasivo, así como las diferentes tipologías, dentro del contexto de la contabilidad.
- Activo: es el conjunto de bienes y derechos bajo control económico de la empresa.
- Activo fijo: agrupan todos aquellos bienes que no cambian durante periodo de explotación de la empresa o año fiscal. Algunos ejemplos:
- Terrenos
- Edificios
- Mobiliario
- Maquinarias
- Herramientas
- Vehículos…
- Activo circulante: agrupan todos aquellos activos líquidos disponibles a la fecha de cierre del ejercicio contable, o transformable en dinero en los doce siguientes meses. Algunos ejemplos:
- Caja
- Bancos
- Inversiones a corto plazo
- Existencias
- Deudores...
- Activo diferido: agrupa los gastos abonados por anticipado sin haber sido utilizados hasta el momento, sobre los cuales se espera recibir un servicio explotable en un futuro. Algunos ejemplos:
- Seguros de la oficina
- Gastos de organización
- Contratos pagados por anticipado...
- Activo fijo: agrupan todos aquellos bienes que no cambian durante periodo de explotación de la empresa o año fiscal. Algunos ejemplos:
- Pasivo: integra todas aquellas obligaciones (deudas o compromisos) a terceros.
- Pasivo exigible: representa la totalidad de las deudas que la empresa tiene con terceros, suponiendo financiación externa, ya sea a corto o largo plazo.
- Pasivo no exigible (o fondos propios): representa el conjunto del capital social y las reservas de la empresa.
- Pasivo contingente: representan las obligaciones manifestadas a raíz de acontecimientos del pasado, la existencia del cual es consecuencia de un acontecimiento futuro o que no está contemplada en los respectivos libros contables.