Cuando un mercado está saturado, es increíblemente difícil hacerse un hueco considerable. Y si no, que se lo digan a Microsoft, quien lleva empujando sin éxito y a base de talonario a Windows Phone desde hace un lustro.
Sí, han vivido ligeras alegrías como el año 2013 y, por momentos, el año 2014, cuando Windows Phone parecía comenzar a emprender el vuelo gracias a los dispositivos ultrabaratos lanzados por Nokia (como el Lumia 520, Lumia 620, Lumia 720, etcétera). Pero, como si de un espejismo se tratase, esa alegría y esa sensación de comodidad ha ido desapareciendo progresivamente hasta llegar al punto actual, el cual confirma nuestros peores presagios: Windows Phone no es capaz de levantar cabeza.
Los últimos datos de Kantar Worldpanel reflejan una caída considerable de la cuota de mercado de Windows Phone en numerosas regiones del mundo. En España, por ejemplo, ha registrado un 2.9% de cuota de mercado, un descenso de casi 50% YOY. En febrero del año pasado, registró 4.7%.
Este descenso también es perceptible en otras regiones como Reino Unido, donde el pasado mes de enero se adjudicó el 7.4% de cuota de mercado. Una caída importante respecto al 11.3% que marcó justo un año antes en la misma región. En Italia, por el contrario, la caída ha sido menor, descendiendo desde los 16.1% hasta el 14.4% en febrero de 2015.
Las únicas zonas que dan alegrías a Microsoft son Latinoamérica, Alemania y Francia. En Latinoamérica, ha permanecido estable la cuota de mercado durante el último año. Concretamente, Windows Phone ha pasado en Argentina del 9.4% al 9.1% durante el último año, una caída ínfima comparada con el resto de datos anteriormente mencionados. En Alemania y Francia, la situación es aún mejor, pues la cuota de mercado ha aumentado respecto al mismo periodo del año anterior.
A pesar de las pequeñas alegrías de Alemania y Francia, estos resultados son un tanto desastrosos para una compañía del calibre de Microsoft, quien ha invertido una gran cantidad de tiempo y recursos en hacer que esta plataforma despegue. No obstante, todos esperan que la situación dé un vuelco con la próxima versión del sistema operativo, la cual llegará a lo largo de la segunda mitad de 2015 y unificará todas las plataformas en las que la compañía de Redmond trabaja actualmente.
¿Será esto suficiente para invertir la situación de Windows en el mercado mobile? Nadie puede responder con certeza a día de hoy. Lo que sí parece obvio es que las balas se agotan para Microsoft y Windows 10 podría ser la última que quede en su recámara.
fuente: http://hipertextual.com/